sábado, 6 de diciembre de 2008
Tan sólo...
Sólo porque hoy sé con certeza que no es imposible, nada lo es.
Sólo porque deseo por una única vez sentirme protagonista, y no una mera espectadora.
Sólo porque espero rotunda y desesperadamente que así sea, que así se den las cosas.
Sólo porque creo que me haría feliz, y eso sería un gran autodescubrimiento.
Sólo porque ya no tengo miedo a cometer errores.
Sólo porque comprendí que la vida es corta y mañana puede ser tarde o demasiado lejano para perder tiempo.
Sólo porque estoy dispuesta a jugar este juego, aceptando los riesgos.
Sólo porque existen millones de razones que prueban mis teorías y una sola que demuestra lo contrario.
Sólo porque debo dejar de cuestionar y de cuestionarme.
Sólo porque he decidido comenzar a vivir mi vida, y no la de los demás.
AQUÍ TIENES MIS RAZONES.
Ahora demuestrame que estoy equivocada, que siempre lo estuve, todo este tiempo. Que me complico demasiado, que soy rebuscada. Que no puedo vivir un sólo día sin reclamar explicaciones de todo, y simplemente existen cosas que no la tienen. Que exijo demasiado y mucho más a mí misma. Que de esta manera es imposible vivir. Que esto no es lo que planificaste. Que la vida puede ser sencilla y de color rosa...
domingo, 30 de noviembre de 2008
Crea tu momento
Esta publicidad de Mumm ilustra con más detalles lo que es un hombre sexy, ideal, irresistible... en otras palabras una completa utopía en esta época de escasez viril.
Ahora me pregunto: ¿los momentos se crean o son un resultado librado al azar? El eterno dilema se presenta de nuevo: ¿CASUALIDAD O CAUSALIDAD?...
sábado, 29 de noviembre de 2008
Carta al Destino
Algunas personas quieren tenerlo todo, pero sabes muy bien que no es mi caso. No estoy pidiendo milagros ni nada parecido, sólo quiero que me mantengas del lado seguro, de esa "lista pendiente" hasta que encuentre mi equilibrio de nuevo. Luego, puedes volver a jugar, incluso jugaríamos juntos la revancha. Sólo te pido eso, un tiempo, si es que no quieres verme caer. Sé que prefieres verme volar, y yo también. Dame una última oportunidad para hacer las cosas bien.
sábado, 22 de noviembre de 2008
Masoquismo Hubierístico
A ver si nos entendemos, la vida es un conjunto sucesivo de decisiones, o no? Es decir, vivimos elegiendo una opción entre un conjunto de alternativas excluyentes. Las opciones rechazadas lo fueron por algún motivo racional -o no- en el momento de la decisión. Entonces, ¿de qué sirve seguir analizándolas una y otra vez como en una especie de ciclo vicioso iniciado obviamente por alguna frase del tipo "Si hubiera..."?
¡No tiene sentido, señores! Por Dios, es un completo martirio. Comprendan el significado real del término y no sigan ocultandóse la verdad a ustedes mismos:
HUBIERA = NO PASÓ NI VA A PASAR = NUNCA = JAMÁS = PERDISTE
Odio a la gente que no puede vivir sin usar este torturante término. Es totalmente absurdo sacar el costo de oportunidad de vivir. ¿A quién se le ocurrió semejante boludez? Seguramente fue inventado por algún tipo de masoquista exponencialmente fumado que no encontró otra salida para darle sentido a su insignificante y mísera vida que arruinándole la existencia al resto del mundo.
Tratando de buscar explicaciones y para verificar que no me volví loca, encontré el "supuesto" uso de Mr. Hubiera:
1) Se usa este tiempo cuando ya se está hablando en el pasado, para referirse a algo también pasado, pero con una anterioridad de la acción.
Ejemplo: Era una lástima que no hubiera estudiado inglés antes de ir a la universidad. (¡Lástima! ¿Ven a lo que me refiero?)
2) Muchas veces corresponde a acciones hipotéticas o no realizadas, situadas en el pasado. (De vuelta PASADO. Hipotético = Utópico = Seguí soñando = No, no, ni en tus sueños)
3) Indica una anterioridad de la acción, y en este caso se traduce generalmente por un reproche de lo que hubiera debido hacerse en un momento dado pero que no se hizo. (Reproche! ¿Acaso no basta con la insoportable voz de nuestra conciencia?)
4) En exclamaciones, se refiere a acciones de cumplimiento imposible, acciones que nos arrepentimos en cierto modo de no haber hecho o expresan algo que no pudo ser. (Más claro imposible, me reservo la $%@#&%#..!!!)
En conclusión, nuca sabremos lo que hubiera ocurrido porque simplemente no pasó y por algo son las cosas. Terminemos con esta farsa de una vez por todas. Acepten que el tren ya pasó.
viernes, 14 de noviembre de 2008
¿Ser o no ser?
¿Por qué a veces nos complicamos tanto poniendo una careta frente a nosotros? ¿Será que en nuestro inconsciente esta máscara es nuestro airbag, nuestra red de seguridad, un salvavidas que nos evita salir lastimados? Muchas veces, tenemos la absurda creencia de que mostrarnos serios y cortantes, hacernos pasar por témpanos de hielo sin emociones, es lo único que nos garantiza el respeto. Creemos que si logramos demostrar a los demás que nada ni nadie nos afecta, entonces nadie intentará probar que nos equivocamos. Sin embargo, ¿hasta dónde somos capaces de seguir con esta farsa, de continuar mostrando algo que simplemente no somos, de eternizar nuestros más profundos deseos?
He aquí la GRAN ENCRUCIJADA SHAKESPEARIANA: ¿seguimos engañando o seguimos engañándonos?
Racionalmente, esta actitud de extrema hipocresía, viene acompañada de una protección extrema, al igual que cualquier combo 2x1. Pero como cualquier promo, también tiene su lado oscuro que, generalmente, no es siquiera considerado. ¿Acaso entre tanto despotismo no nos damos cuenta de la miseria de nuestros sentimientos reprimidos que piden a gritos ser liberados? ¿Por qué nos cuesta tanto admitir que tenemos necesidades? Gracias a Dios no somos autosuficientes y requerimos de los demás. Tenemos necesidad de compañía, amor, apoyo, cariño, intercambio desinteresado; dar y recibir. No consigo comprender hasta donde llega nuestro miedo al rechazo que nos lleva a vivir ocultando lo que de verdad sentimos o pensamos. Entonces mi pregunta es: ¿si es del rechazo de lo que desesperadamente escapamos, porque terminan siendo nuestros sentimientos los fugitivos?
Retomando el primer párrafo de arriba -que describe tan sólo un fugaz segundo de mi finita existencia-, quería agregar que a veces basta con una sonrisa para despertar de esta fría verdad y sacarnos la careta, dejando a otros echar un vistazo a nuestras verdaderas pasiones, aunque sea de a poco, paso a paso, con una simple mirada.
lunes, 3 de noviembre de 2008
Looking for an answer...
Misbehavior
James Morrison
sábado, 1 de noviembre de 2008
A key to hapiness...
miércoles, 1 de octubre de 2008
The truth about life: Everybody makes mistakes...
Incontables... por lo menos en lo que me concierne a mí y a todos los aspectos de mi vida. Sí, sí... al principio todo bárbaro porque como cualquier persona racional e inteligente, por supuesto que no cometo el mismo error dos veces... yo? Me estás jodiendo no? Caer en la misma de vuelta? No, no nunca más! "Ya aprendí mi lección!, no necesito que me repitas nada".
Dejamos pasar unos días o X tiempo (dependiendo de la capacidad racional de cada persona o de la situación en cuestión), pero lo que es seguro es que todos vuelven a darse la cabeza contra la pared en algún momento. Porque esa es la verdad: la vida está llena de errores, es así cómo aprendemos o continuamos avanzando. Lo importante es levantarse o al menos animarse a enfrentar la realidad...
Hay ciertas veces en la vida en que sentimos que todo nos desborda, las cosas escapan de nuestro alcance y nos damos cuenta de que estamos perdidos, no encontramos el camino de vuelta. La realidad es muy distinta de cómo la habíamos planificado y ni siquiera buscamos comprender cómo llegamos hasta donde estamos. Simplemente recurrimos al olvido como droga para hacer el presente tolerable. ¿Pero es tan sencillo como parece? No a mi entender. Perder el control de nuestra vida, de nuestras acciones, de nuestros deseos es sin duda el símbolo más incuestionable de la debilidad humana. Por su parte, el olvido, más allá de ser una cura pasajera, se vuelve una adicción, se vuelve un velo permanente entre nosotros y la realidad, imposibilitándonos reconocer nuestros errores y por consiguiente, volvemos a caer en los mismos una y otra vez. En definitiva, es esta sensación de caída libre la que se apodera de nosotros y limita nuestras potencialidades. Pero en realidad es sólo eso, una sensación, una ilusión, una idea. Todos cometemos errores, lo importante es ser conscientes de ellos y no dejarnos arrastrar por este efecto dominó que nos lleva al caos. Cada desliz representa una nueva oportunidad para comenzar de nuevo, desde cero, y con mayor experiencia y sabiduría que antes. Lo bueno de las caídas libres es que sólo en esas circunstancias te das cuenta de quienes verdaderamente siempre van a estar a tu lado...